AySA recuerda la importancia de hacer un uso racional del agua potable para evitar el derroche de un recurso vital, sobre todo en verano, la época donde se registran temperaturas más altas y aumenta el consumo.
Además, es importante considerar que, el sistema de provisión de agua potable de AySA se encuentra directamente relacionado con el suministro eléctrico, por este motivo, al ahorrar agua, también se contribuye al ahorro energético.
Para llevar adelante el proceso de captación, potabilización, transporte y distribución del agua potable se requiere del suministro eléctrico, un insumo esencial en la prestación de nuestros servicios, ya que alrededor del 82% de nuestro consumo eléctrico se encuentra destinado al funcionamiento del sistema en su totalidad. De este modo, la empresa garantiza la llegada del servicio a 11 millones de usuarios.
Por ejemplo, la Planta General San Martín, la planta potabilizadora más grande que procesa 3,1 millones de m3 de agua por día, consume más de 110 millones kWh por año. Del mismo modo, ocurre con las 14 estaciones elevadoras del sistema, encargadas de la impulsión de agua para su distribución, que tienen un consumo de 300 millones kWh por año. De esta manera, el consumo total de AySA equivale a la energía utilizada en 150.000 inmuebles residenciales.
Es por ello, que la empresa remarca la importancia de hacer un uso solidario y responsable del servicio, principalmente quienes residen en zonas aledañas a las Plantas Potabilizadoras y Estaciones Elevadoras, para que el proceso de transporte del agua hacia las localidades más alejadas pueda realizarse de manera efectiva. De esta manera, todas las personas usuarias dispondrán de un mejor servicio en sus domicilios.
AySA recuerda que ante las variaciones de tensión eléctrica o cortes de energía, se pueden ver perjudicados. Estas situaciones, sumado a la alta demanda del servicio, provocan que la presión en la red disminuya y en algunas zonas sensibles, falte el agua temporalmente.
Esto se intensifica en las áreas que se abastecen por agua de origen subterráneo, que no tienen subestaciones propias como las grandes plantas, ya que las perforaciones se encuentran conectadas al tendido eléctrico domiciliario y no tienen subestaciones propias como las grandes plantas, por lo tanto, cuando no hay luz en la zona, también se ve interrumpido el servicio de agua potable.
Sin limitar el consumo básico y necesario para la alimentación y la higiene personal, pero prestando atención a ciertas situaciones cotidianas en las que se desperdician grandes cantidades, podemos reducir el derroche de agua. En esta época, en la que el agua potable es fundamental, es tarea de todos y todas cuidarla y administrarla con responsabilidad.
El agua potable es un recurso esencial para el cuidado de la salud y la calidad de vida de la población. Es por esto que la Organización Mundial de la Salud, sostiene que por cada dólar invertido en el sistema de agua y cloacas, se ahorran siete dólares en el corto y mediano plazo en el sistema de salud.