
En un fallo que representa un revés para el gobierno de Javier Milei, la Justicia federal resolvió suspender la aplicación del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que imponía restricciones al derecho a huelga en sectores considerados esenciales.
La medida cautelar fue dictada en respuesta a una presentación de la Confederación General del Trabajo (CGT), que denunció la inconstitucionalidad de la norma por afectar derechos laborales fundamentales.
Los alcances del DNU y la respuesta sindical
El decreto firmado por Milei establecía límites a las medidas de fuerza en áreas como salud, educación, transporte y servicios públicos, con el argumento de garantizar la continuidad de los servicios básicos. Sin embargo, desde la CGT lo calificaron como un avance autoritario contra los sindicatos y los derechos laborales consagrados en la Constitución Nacional.
En su fallo, la jueza que intervino en la causa consideró que existen elementos suficientes para presumir que la medida vulnera normas constitucionales e internacionales de protección laboral. Por ello, dispuso la suspensión cautelar del decreto hasta que se resuelva la cuestión de fondo.
Reacciones y escenario político
Desde la CGT celebraron la decisión judicial como «un triunfo de la democracia y del movimiento obrero», asegurando que seguirán utilizando herramientas legales y políticas para frenar los intentos de limitar la protesta social y los derechos laborales.
Por su parte, voceros del gobierno cuestionaron el fallo y no descartaron apelar la medida, en medio de un contexto de creciente tensión entre el Ejecutivo y los gremios.
Este nuevo capítulo en la disputa entre el gobierno de Milei y el sindicalismo se suma a un clima social convulsionado, marcado por paros, movilizaciones y el rechazo a las políticas de ajuste impulsadas por el oficialismo