Se trata de un repartidores que operan en la modalidad de aplicaciones. Pese a la pandemia, hablan de “zonas liberadas” y de hechos que se repiten. “Los trabajadores de deliverys estamos expuestos y nos jugamos la vida.” El viernes protestarán en Yrigoyen y Colombres.
Trabajadores que operan bajo la modalidad de aplicaciones realizarán este viernes 12 una protesta en Hipólito Yrigoyen y Colombres desde las 15 en la que reclamarán por mayores medidas de seguridad ya que hay áreas que consideran “liberadas” lo que significa un gran peligro para un repartidor, “ya que los delincuentes saben que, al casi no haber gente en la calle, nosotros siempre estamos trabajando y con algo dinero encima”.
“Sabemos que la policía hace lo que puede y que a veces no dan abasto, pero es importante reclamar porque estamos ante una problemática real. Nos Jugamos la vida”, señaló a Data Conurbano Claudio, uno de los “veteranos” de los repartidores de Lomas de Zamora.
En pleno aislamiento social, preventivo y obligatorio a causa de la propagación del coronavirus, para muchas familias el servicio de delivery se volvió primordial, pero la inseguridad dificulta esta prestación ya que los trabajadores vienen denunciando violentos robos casi a diario y a veces pierden, además del dinero y el celular, su medio de locomoción: su herramienta de trabajo (ver: “Cuarentena peligrosa: trabajadores de deliverys reclaman contra el aumento de la inseguridad”).
“Hoy le robaron a un compañero de Rappi en un ‘pedido fantasma’, hacen pedidos y te buscan cambiar la dirección y hacen una emboscada. Así, como con otros ‘métodos’, nos roban todos los días.”
La del viernes no será la primera protesta contra la inseguridad, ya que hace un mes habían efectuado un reclamo, oportunidad donde pudieron hablar con referentes de seguridad en Lomas quienes reconocieron ante el grupo motoquero que la intención es llevar adelante patrullajes más exhaustivos, “pero a veces no tienen suficientes medios como para abarcar todo el trabajo” (ver: “Trabajadores de deliverys de Lomas volvieron a reclamar por mayor seguridad”).
Tal como informó este medio, los repartidores se conocen, están organizados en grupos de whatsapp por aplicación: Rappi, Glovo, Pedidos Ya y hasta Uber -Ubereats- y se van “cantando” lo que ven en la calle y confeccionan una suerte de mapeo diario que socializan.
Saben que hay precarización también, son conscientes de ello, pero necesitan trabajar, por eso sólo en Lomas promedian los 800 deliverys que en esta pandemia pueden llegar a los mil.
El registro de las aplicaciones para pertenecer al grupo de reparto exige una serie de formularios virtuales y papeleos que muchos comenzaron a tramitar en estas semanas, pero según contó Claudio, “hay casos de ladrones que se hacen pasar por deliverys que andan con bolsos de marcas de aplicaciones”.
“Las empresas te piden una serie de cosas para trabajar, pero no son muy precisas sobre la persona que trabaja, por lo que haya un ladrón es algo que puede pasar y dicen que pasa”, señaló, y agregó que “algunas aplicaciones pueden indicar zonas complicadas para circular por la inseguridad, pero no suma mucho, ya que los robos se pueden dar en cualquier momento”.