Esta tarde, un grupo de repartidores que operan en la modalidad de aplicaciones, realizaron una nueva protesta en el centro de la ciudad para pedir por más seguridad. Pese a la pandemia, hablan de “zonas liberadas”. “La policía entiende y quiere ayudar, pero reconoce que es poco lo que pueden hacer.”
En Hipólito Yrigoyen y Colombres mano Provincia, Lomas de Zamora, un grupo de motoqueros realizó esta tarde una protesta para pedir “mayor seguridad” en las áreas de trabajo, ya que los repartidores “venimos sufriendo distintos hechos de inseguridad que muchas veces son violentos”.
“Resolvimos hacer esta protesta en menos de 24 horas porque pensamos con los compañeros que esto no da para más”, señaló un repartidor a Data Conurbano. “Hicimos el reclamo por más seguridad porque también notamos que hay como zonas liberadas, áreas donde parece que cualquier cosa puede pasar.”
Al reclamo se acercó un referente de la seguridad del distrito junto con efectivos, quien reconoció ante el grupo motoquero que la intención es llevar adelante patrullajes más exhaustivos, “pero a veces no tienen suficientes medios como para abarcar todo el trabajo”.
“Hay muchas cosas que nos juegan en contra, ya que somos uno de los pocos rubros imprescindibles para circular en esta pandemia y necesitamos más seguridad ya que no solo nos roban a punta de pistola, sino que nos golpean, tiran de la moto o de la bici. Y lamentablemente nos dicen que con el tema de las cámaras tampoco podemos contar, porque en el CPU (Centro de Protección Urbana) hay problema con los operadores”, apuntaron.
Tal como informó este portal la semana pasada (ver “Cuarentena peligrosa: trabajadores de deliverys reclaman contra el aumento de la inseguridad”), se trata de un grupo de casi mil repartidores de Lomas que operan bajo Rappi, Glovo, Pedidos Ya y hasta Uber -Ubereats-, quienes, comunicados entre sí y a través de grupos de whatsapp, se informan sobre la presencia de delincuentes en determinadas zonas.
“En estas semanas hay más trabajo por suerte y muchos negocios se abrieron a la mensajería. Hay menos movimiento en la calle y hay momentos en que solo se ven deliverys, por eso los ladrones nos buscan. Saben que algo siempre llevamos encima.”
