Así lo afirman desde el Sindicato del sector. Lograron que varias provincias y municipios modifiquen normativas que prohibían la pirotecnia y posibilitaron un importante crecimiento de la actividad.
Cada vez son más las provincias y municipios que permiten los Fuegos Artificiales y productos pirotécnicos de bajo impacto sonoro, lo que permitió una importante reactivación de la actividad, con respecto a años anteriores.
Así lo informaron desde el Sindicato Único de Empleados de la Industria de la Pirotecnia y Afines (SUEIPA), que conduce Guillermo Cantatore.
«Es un cambio de paradigma que logramos instalar en los últimos años”, explicó Cantatore. “Crecimos muchísimo con los productos de bajo impacto sonoro, a partir de conseguir que se modifiquen muchas ordenanzas que prohibían la actividad y dejaban sin posibilidades de crecimiento a cientos de trabajadores», aseguró.
“Muchos comprendieron que la prohibición no daba resultados positivos y que, por el contrario, de algún modo incentivaba la clandestinidad, con todos los riesgos que ello implica”, sostuvo el dirigente gremial.
En el mismo sentido se pronunciaron desde la Cámara Argentina de Fuegos Artificiales, que nuclea a fabricantes, comerciantes e importadores de artículos de pirotecnia de venta libre y realizadores de espectáculos.
“Desde hace años CAEFA promueve el uso de fuegos artificiales amigables, de bajo impacto sonoro y productos lumínicos, y representa a todas las empresas de un sector conformado por Pymes nacionales familiares, muchas con 100 años de vida y ya gestionadas por la cuarta generación familiar. Los fuegos artificiales legales utilizados correctamente son completamente seguros y generan trabajo para 60 mil personas en Argentina”, expresaron.