La Ciudad de Buenos Aires intensifica su lucha contra los «trapitos» con un despliegue especial de patrullaje y controles de seguridad durante Semana Santa. En lo que va del año, la Policía ha detenido a 2 mil personas vinculadas a esta actividad, mientras se endurecen las sanciones para erradicar esta problemática.
El Jefe de Gobierno, Jorge Macri, supervisó esta mañana un operativo desde el Centro de Comando móvil del 911 en la Avenida Costanera, frente al Aeroparque Jorge Newbery. Acompañado por el ministro de Seguridad, Horacio Giménez, y el jefe de la Policía, Diego Casaló, Macri declaró: “Los trapitos son una mafia, extorsionan y amenazan a los vecinos. Los estamos sacando uno por uno y no vamos a parar. Necesitamos que la Legislatura apruebe el proyecto de ley que enviamos para aumentar las penas. Con los delincuentes, tolerancia cero”.
El proyecto de ley enviado a la Legislatura propone sanciones más severas para quienes ofrezcan servicios de estacionamiento, cuidado de coches o limpieza de vidrios sin autorización legal. Las penas incluyen arresto de 5 a 30 días, trabajos de utilidad pública de 10 a 45 días, o multas que oscilan entre $582.296 y $2.926.480. Además, se aplicarán prohibiciones de concurrencia y restricciones de cercanía al lugar donde se haya cometido la contravención.
En casos relacionados con eventos masivos, las sanciones se incrementarán, llegando hasta 60 días de arresto para los organizadores o promotores. Asimismo, las entidades vinculadas a estas actividades podrían enfrentar multas de hasta $14.632.400 y clausuras de sus instalaciones por un período de 15 a 60 días.
Durante esta Semana Santa, se espera la llegada de 108 mil turistas a la Ciudad, con una ocupación hotelera del 68%. Para garantizar la seguridad, los operativos de control y patrullaje se reforzaron desde el miércoles por la noche y continuarán hasta el lunes por la mañana.