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El paso de Maradona por la cancha de Temperley

Jugó dos veces oficialmente frente a Temperley en 1977. Pero el encuentro del 9 de noviembre fue único porque el Celeste le ganó 2 a 1 a Argentinos Juniors, y de yapa el 10 hizo magia en Turdera.

Por Federico Guerra*

Ya era líder. En 1977 «el Diego» jugó en el Beranger con su querido Bicho de La Paternal.

“(..) Me dijo (juan Carlos) Montes: ‘va a ir al banco de primera’ ¿Cómo? ‘Sí va a ir al banco de primera’. En ese tiempo no se concentraba, entonces yo agarré y fui con el corazón en la boca hasta decirles a mi viejo y a mi mamá. Y claro cuando fui, le dije a mi mama. Y todo Fiorito sabía que yo jugaba al otro día. Cuando salí, al otro día, mi vieja me acompañó hasta la puerta: ‘Voy a rezar por vos hijo’. Y mi viejo pidió salir antes del laburo, porque fue a trabajar, para irme a ver. Era un miércoles a la tarde”, habla Diego Armando Maradona y repasa la previa de ese 20 de octubre de 1976 que quedará para toda la vida como su debut en Primera con la camiseta de Argentinos Juniors. Tenía aún 15 años y comenzaba a escribir de zurda la mejor página de la historia de la redonda. Casi un año después visitó el Alfredo Beranger en un encuentro frente a Temperley por el Torneo de 1977, fue un 9 de noviembre inolvidable con victoria Celeste.

“Para algunos será una novedad, para otros un recuerdo. Diego Armando Maradona jugó con la camiseta de Argentinos Juniors en la cancha de Temperley. (…) Fue la única vez que pisó el estadio Alfredo Martín Beranger. (…) En esa tarde el Diego tenía tan solo 17 años de edad”, destaca Daniel Remolina, miembro del Departamento Histórico y Museo del Club, en Hasta Mis Cenizas serán Celestes.

La palabra de Diego es de una entrevista que le realizó Ernesto Cherquis Bialo en 2000 (guardada por el sitio Play & Rec) y que difundió por AM 750 el periodista Sergio Altieri. Pasaron 44 años de aquella tarde del inicio del romance de Diego, la redonda y aquel pedido del DT Montes cuando el zurdo saltó a la cancha en la derrota frente a Talleres de Córdoba: “Vaya pibe, haga lo que usted sabe. Y si puede tire un caño”. Cosa que hizo.

Diario Popular, 16/11/1977. Una reliquia de la hemeroteca del colega Fernando Esteban, integrante del Departamento Histórico y Museo del CAT.

Con algunos partidos en su haber el 10, llegó al Alfredo Beranger el 9 de noviembre de 1977 (ya se habían enfrentado ese año en La Paternal en un encuentro sin goles, y en el Gasolero vio la roja De Marta por infracción a… Maradona) por el Torneo Metropolitano que lo tenía al Celeste peleando el descenso. Y fue victoria local. Muy trabajosa y con goles de Mariano Biondi y Juan Carlos García Sangeris. Y eso que José Luis Álvarez abrió la cuenta para El Bicho a los 2 minutos del complemento.

El detalle lo aporta Marcelo Ventieri, historiador de Temperley y miembro del Departamento Histórico y Museo del Club: “La revancha en el Beranger se disputó en la penúltima fecha y estuvo cargada de tensión ya que Temperley se jugaba la permanencia en la categoría. La primera mitad finalizó sin abrir el marcador. A los dos minutos de la etapa complementaria, Carlos Álvarez -centrodelantero del Bicho y goleador del torneo- abrió el marcador para la visita. Once minutos más tarde empató Mariano Biondi -figura Celeste de ese campeonato- y en el minuto final García Sangenis convirtió el penal que le dio a Temperley una justa victoria”. ¡Jugaron Biondi con Maradona en el Beranger!

En el homenaje al Gran Capitán de la Selección, vale también el recuerdo a aquel 11 Gasolero: Guibaudo; Belvedere, García Sangenis, Cvitkovic y Donaires; De Marta (Bello Meza), Pereyra y Biondi; J.C.Verón, Freire (J.A.Sotelo) y Noguera. D.T. Roberto Iturrieta-Néstor Borgogno.

Eduardo Sacheri, en su texto Me van a tener que disculpar, dejó, acaso, la mejor de las pinturas hechas con palabras: «Ya que el tiempo cometió la estupidez de seguir transcurriendo, ya que optó por acumular un montón de presentes vulgares encima de ese presente perfecto, al menos yo debo tener la honestidad de recordarlo para toda la vida. Yo conservo el deber de la memoria”. Y ponemos, también, nuestra firma.

El autor es periodista e historiador

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