La medida es para restringir el acceso al establecimiento para personas que no trabajen en el lugar. Además, si ingresa un nuevo paciente se lo debe aislar durante 14 días en una habitación individual.
Restringir el acceso, prohibir el ingreso y egreso a toda persona que no trabaje en el establecimiento, disminuir al mínimo el contacto entre personal de la salud y adultos mayores y utilizar videollamadas para mantener el vínculo con familiares, son algunas de las recomendaciones del protocolo que el Ministerio de Salud bonaerense confeccionó para los geriátricos ante la pandemia de coronavirus.
Entre las indicaciones sanitarias se destaca que se deben proponer a los residentes «alternativas para mantener el contacto con sus familiares como videollamadas o llamadas telefónicas» y se detalla que «ante un nuevo ingreso de un residente se deberá indicar 14 días de aislamiento en una habitación individual, teniendo que contemplar incluso que el residente desayune, almuerce, meriende y cene allí».
El protocolo divulgado en abril solicita a los encargados de los geriátricos «generar circuitos diferenciales de ingreso y circulación del personal y de los residentes» y recomienda «tener una ruta de ingreso accesorio para el personal de salud y para diferentes servicios».
Otra de las sugerencias es realizar controles de temperatura, de tos o dificultades respiratorias de los residentes dos veces al día, y tomar la temperatura corporal al personal ingresante.
Además, propone que las personas que desarrollen tareas en los geriátricos tienen que vestirse «con ropa de trabajo (ambo), que debe colocarse en la residencia, y usar barbijo durante la atención directa».
En paralelo, busca asignar al personal de cuidado o de enfermería un grupo determinado de residentes «para poder hacer un seguimiento diario de la salud y registrar la evolución» y solicita evitar la rotación del personal asignado para la atención directa de las personas mayores.
También promueve clausurar las zonas comunes «para disminuir al máximo la interacción entre los residentes» y hacer «limpieza y desinfección permanente de superficies y objetos de uso diario».
El protocolo indica que no deben realizarse mezclas de lavandina con detergentes u otros productos de limpieza; y que se deben rociar con alcohol diluido en agua o lavandina todos aquellos elementos que ingresen a la residencia (viandas, regalos, bolsas o ropa).
Finalmente, el protocolo plantea que el personal deberá llevar «el pelo recogido, uñas cortas y sin esmalte» y que no se permite la utilización de anillos, pulseras, aros o elementos que no pueda ser higienizados correctamente.
