Una niña quedó en medio de un violento hecho de inseguridad cuando dos sujetos que portaban un arma de fuego y un arma blanca, encañonaron al papá y amenazaron a la mamá de otra criatura que, desesperada, les pidió que dejen a la nena.
Los dos sujetos doblaron la esquina cercana de la calle Rondeau y sorprendieron al hombre cuando abrió el vehículo para subir a la hija lo que desató una serie de gritos de terror: el delincuente le puso la pistola en el cuello y le exigió las pertenencias, al mismo tiempo el cómplice le exhibió un cuchillo a la mujer tras las rejas de la casa y tanteó el picaporte de la puerta con la intención de ingresar a la propiedad.
Sin posibilidad de alcanzar a la mujer, el sujeto fue en ayuda del compañero criminal que se alzó con la alianza de matrimonio, el teléfono celular, la billetera y las llaves del rodado de la víctima. «Dame a la nena», rogó Analía que se acercó y abrió el portón para entrar a O. que corría desesperada.
El papá no se resistió, la brutalidad de los sujetos fue innecesaria porque les entregó todo, solo les pidió que le dejen la mochila escolar de la niña.
Instantes después, con dificultad para poner en movimiento la camioneta con caja automática, los delincuentes escaparon en dirección al partido de Quilmes y permanecen prófugos.
Un día después las familias de las nenas de cuatro años buscan a una psicóloga que las ayude a superar el estrés que les provocó la secuencia brutal.
