La Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora trabaja en un prototipo de robot capaz de rociar productos sanitizantes en áreas abiertas y reducir hasta un 98% el riesgo de proliferación de virus, incluyendo el Covid-19. El proyecto fue seleccionado en el marco de la convocatoria «Programa de Articulación y Fortalecimiento Federal de las Capacidades en Ciencia y Tecnología COVID-19» del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación
Un equipo formado por científicos y científicas de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora trabaja en el desarrollo del “Robot móvil sanitizador ultrasónico para espacios abiertos”, una tecnología pensada para minimizar los riesgos de propagación y contagio de Covid 19.
El proyecto nació de la conjunción de las investigaciones que en la unidad académica realizan los distintos laboratorios: “Vimos que teníamos conocimientos que podríamos amalgamar para poder hacer un aporte, tratamos de reciclar esos sabres y capacidades y reorientarlos para aportar algo”, sostiene Fernando Massaro, investigador de la UNLZ.
Así, sumaron los trabajos y desarrollos del Laboratorio de Aguas, el de robótica y el de electrónica y ultrasonido. Además, la iniciativa cuenta también con la participación de empresas de base tecnológica que alguna vez pasaron por el programa de incubación de la facultad.
«El equipo -de bajo costo- estará montado sobre un “chasis robótico de unos 70 cm de diámetro que se desplazará de forma autónoma (no requiere un operador) ya que tendrá un sistema que le permite radarizar todos los obstáculos que tiene alrededor, procesarlos y entender cómo moverse entre ellos con poco gasto de energía”, describe el experto. Además, el prototipo tendrá una micro-planta generadora de agua ultra-pura (baja en impurezas), una reserva de químicos sanitizantes para al menos 2 horas de trabajo continuo y atomizadores ultrasónicos para la generación de nieblas con productos bactericidas, germicidas, virulicidas y fungicida.
El robot podrá transitar por diferentes lugares y su función será la de estar de forma constante generando una dispersión aersolizada de sanitizante. “Hay variedad de productos que pueden usarse”, indica Massaro y agrega: “Eso va a depender después del usuario y de la disponibilidad y costo del producto. Puede ser agua de alcohol hasta otros más sofisticados de mayor eficiencia e inocuos que permitirán que se aplique cuando haya personas”.
El trabajo del grupo de expertos determinará en toda esa gama de productos que pueden utilizarse la dosis y tiempo de aplicación de cada uno para programar la velocidad de traslado y la secuencia de atomización.
Este método minimiza la necesidad de insumos (agua y desinfectantes), lo cual, sumado a la movilidad robótica, permitirá reducir los tiempos empleados por el personal de limpieza para lograr la descontaminación y, a su vez, evitar la exposición continua de esas personas a los químicos.
El equipo de trabajo, liderado por Fernando Massaro, está formado por científicos y científicas del Instituto de Investigaciones en Ingeniería Industrial (I4), el Instituto de Investigaciones de Tecnología y Educación (IIT&E) -ambos asociados a la Comisión de Investigaciones Científicas de la provincia- y la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora. El “Robot móvil sanitizador ultrasónico para espacios abiertos” fue seleccionado en el marco de la convocatoria «Programa de Articulación y Fortalecimiento Federal de las Capacidades en Ciencia y Tecnología COVID-19» y recibirán financiamiento por parte del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación para su desarrollo.
