Romina Ibarra estudia Ciencias Políticas y su hija Milagros empezó el Curso de Ingreso para cursar Audiovisión. Compartieron el inicio del ciclo lectivo juntas. Destacan la oferta académica de la UNLa y reivindican la importancia de las “universidades públicas de cercanía” en la democratización del acceso a la educación superior.
El 1º de febrero de 2023 va a quedar grabado a fuego para siempre en la memoria de Romina Ibarra (45) y Milagros Arias (19). Ese día, madre e hija compartieron la poco habitual experiencia de compartir la vida universitaria juntas. Sucede que durante esa jornada, en la Universidad Nacional de Lanús (UNLa), Milagros empezó el Curso de Ingreso para acceder a la Licenciatura en Audiovisión, mientras que su mamá retomó la cursada de la Licenciatura en Ciencias Políticas, carrera que ya va por la mitad.
Ese instante de felicidad plena que recordarán todas sus vidas fue registrado por Romina -que también es abogada y docente universitaria- en sus redes sociales. En su cuenta de Instagram publicó una historia donde se pudo ver una foto de las dos con el hall central del edificio José Hernández de fondo y la leyenda: “Hoy, madre e hija iniciamos cursada en la @unlaoficial #Audiovisión #CsPolíticas”.
Sensaciones
“Fue un momento de mucha emoción para ambas. Mi hija estaba sumamente feliz y con muchas expectativas por su primer día de universidad y con todos los miedos lógicos que eso conlleva. Eso también me llevó a recordar que cuando empecé la carrera de Abogacía tenía la misma edad que ella”, rememora Romina.
“Haber compartido ese primer día, porque yo iniciaba la cursada de verano, la verdad que fue hermoso; entrar las dos ahí y compartir lo que ella me transmitía: toda su emoción, energía, ganas e ilusión, será inolvidable”, añade.
La elección de la carrera y de la UNLa
La vida universitaria de Milagros dio un giro en noviembre del año pasado. En ese momento estaba terminando la secundaria y había empezado a cursar UBA XXI, el programa a distancia de esa universidad con la intención de ingresar a estudiar Medicina.
Sin embargo, a pesar de que ya había dado finales y le había ido muy bien, se dio cuenta que esa no era su vocación y decidió que quería estudiar Audiovisión.
“Ahí, de inmediato, ingresé a la web de la UNLa para ver si tenía esta oferta, que la desconocía. Entramos a ver el programa, el plan de estudios y el resto de la información. También analizamos la misma carrera en otras universidades, pero nos pareció mejor la de la UNLa por todo lo que ofrece”, explica Romina.
“Además también priorizamos lo que significa la UNLa por su inserción en el conurbano. Nos parecía la mejor alternativa”, agrega.
Además del nivel académico, en la elección también incidió la cercanía. En ese sentido, Romina detalla: “Vivimos en San José, Almirante Brown. Y al elegir la UNLa, Milagros tiene que hacer un solo traslado, no necesita combinar transportes. Toma una línea de colectivo a dos cuadras de casa que la deja en la puerta de la Universidad. Eso es muy importante para los estudiantes porque no solamente permite minimizar tiempo, sino también recursos. Además, ese tiempo que se ahorra puede aprovecharlo en un montón de cosas, ya que en 20 minutos está en la UNLa y el mismo tiempo tarda para volver”.
Por otra parte, Romina asegura que pudo transmitir a Milagros “lo que significa la Universidad pública y gratuita”, la cual “es un derecho y hay que cuidarlo, y eso es con las alumnas y los alumnos en las aulas”, asegura
La importancia de la formación permanente
Romina es abogada recibida en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (UNLZ), donde desde hace tiempo también es docente. Desde entonces emprendió un camino de formación permanente y obtuvo títulos de Especialización en Derecho del Trabajo Individual y Colectivo (“que es lo que más me gusta”, comenta) y un posgrado en Derecho de Familia.
Comenta que la elección de estudiar Ciencias Políticas en la UNLa estuvo motivada por su militancia política y su participación en la función pública: fue concejala en Almirante Brown (2015-2019) y actualmente se desempeña como Coordinadora General de Tierras de ese municipio.
También es por eso que hace poco empezó a cursar la Diplomatura en Políticas Públicas y Gobiernos Locales en la Universidad Arturo Jauretche de Florencio Varela, mediante un convenio que el Municipio de Almirante Brown tiene con esa casa de altos estudios.
Asegura que su plan es seguir capacitándose “dentro de lo que se puede porque una trabaja, estudia y hace un montón de cosas”. Pero considera a la formación “una prioridad” para “ser mejor profesional y, desde la función pública, “poner siempre a disposición de la sociedad lo mejor de uno, con las herramientas que el estudio brinda para poder ofrecer mejores servicios a la comunidad”.
Por último, señala que la pasión por el estudio se la inculcó a Milagros: “Ella nació conmigo estudiando. Entonces entiende claramente que el camino es el del estudio, la formación y el de la Universidad. Y hay que agradecer que en nuestro país contamos con ese derecho de poder acceder a la gratuidad universitaria y contar con universidades en el conurbano como la UNLa, la Jauretche y la UNLZ, entre otras”, concluye.
