La Legislatura de la Provincia de Buenos Aires se encuentra en un momento clave. Este miércoles, la Cámara de Diputados debatirá el proyecto para suspender las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), una medida que ya cuenta con media sanción del Senado.
La suspensión de las PASO no solo pondría fin a un debate que ha generado divisiones internas en el oficialismo, sino que también abriría un nuevo frente de conflicto. La confección de las listas electorales, un proceso que tradicionalmente genera tensiones, promete intensificar el enfrentamiento entre el kirchnerismo y el sector alineado con el gobernador Axel Kicillof, conocido como el «axelismo».
Este conflicto interno podría tener consecuencias significativas para el peronismo, que enfrenta el desafío de mantener la unidad en un contexto de creciente presión por parte de la oposición. Sin un consenso claro, el oficialismo corre el riesgo de debilitarse en un escenario político cada vez más competitivo.
La decisión que tome la Cámara de Diputados no solo definirá el futuro inmediato de las PASO en la provincia, sino que también marcará el rumbo de las estrategias electorales del oficialismo de cara a los próximos comicios
