Se trata de un conglomerado empresarial que creció exponencialmente gracias al ser proveedores del estado. Su avance en la región, el factor Lanús y La Cámpora.
En el mundo económico empresarial corren rumores de todo tipo y uno en particular es el que da cuenta de un “gigante” que parece no detenerse cuyos brazos se extiende a casi todo el país y lo hace gracias a sus “estrechos lazos” en la política.
Se trata del “Grupo L”, cuyo rubro abarca el mundo de las Oficinas Corporativas y consta en su web que se ocupa, además, de “soluciones de alimentación, limpieza y construcción a instituciones públicas y privadas”.
Según indicaron en estricto off, es “un grupo misterioso” cuyo origen data de 1930 gracias a la “visión” de Vittorio Lusardi -hoy la continuidad está dada por sus descendientes, Víctor y su hijo Sebastián- siendo casi pioneros en eso de ofrecer servicios de limpieza de edificios y oficinas, llevándolos a crecer a otras seis empresas abocadas (aún hoy) al catering, eventos, gestión de comedores, distribución y capacitación gastronómica).
El crecimiento fue exponencial al aprovechar el viento de cola y los valores del mercado permitiéndoles competir en forma inmejorable. Hoy “Grupo L” ostenta como sede un edificio corporativo de 8 pisos, tres centros de distribución, un frigorífico y una planta elaboradora de alimentos, empleando poco más de 2.000 personas y facturando más de $50.000 millones por mes.
Contratistas
“Crecieron por ser contratistas del estado. No sufrieron vaivenes de los gobiernos y hoy van por más, siguen con sus negocios en algunas comunas, aunque todavía hay expectativa por el comportamiento del gobierno de Javier Milei”, indicaron desde el espectro accionario, y algunos se animan a decir que “del estado proviene su principal ingreso”.
¿Qué proveen al Estado? Gracias a un acuerdo con CABA de hace algunos años, entregan comida a las cárceles y a buena parte de los comedores.
Expansión y Región
En su crecimiento, motivado por abarcar el mercado, en octubre del año pasado “Grupo L” compró “Compass en Argentina”, otra empresa de servicios de alimentación, pero con perfil “premium”.
“Esta operación ratificó el rumbo de la empresa”, explicaron y agregaron que sumó el “Grupo L” un escuadrón de 3 mil empleados y abarcó al servicio de más de otros 100 comedores en distintos puntos del país.
Pero la oscuridad también se hace notar con la irrupción de “Gyuland SRL”, conocida por acuerdos en municipios para la entrega de “bolsones de comida”, firma que aseguraron “hacen jugar desde afuera”, y mencionaron a un supuesto “testaferro” con el nombre Carlos Enrique Giacoponello, un jubilado ex empleado de “Grupo L” domiciliado en Florida, Vicente López, y cuyo gerente es Santiago Balogh Kovacs, “ex empleado y amigo intimo de toda la vida de Sebastián Lusardi.
“De esta manera busca y consigue su hegemonía en el rubro de la alimentación Institucional en el sector público”, dijeron a la vez que revelaron “el método”.
En el distrito de Tres de Febrero desde hace 9 años son “dueño y señor” del servicio alimentario escolar con el 70% de las zonas cubiertas por empresas de “Grupo L” como “Teylem”, “Equis quince”, “Blue Catering”, “Elevare”; a la vez que el 30% restante es para “Gyuland SRL”.
“Se quedan con el 100% de la caja de la alimentación del partido, sin infringir en el pliego que no permite que una empresa pueda tener el 100% del servicio.”
La Cámpora
De acuerdo a lo revelado, “de la mano de un operador político de La Cámpora quien vive en Avellaneda”, el “pulpo alimentario” buscaría avanzar en distritos alineados políticamente con Máximo Kirchner.
Según se supo, en la última Licitación de julio 2024, en el municipio de Lanús, conducido por el camporista Julián Álvarez, “se están asegurando un año más de negocios turbios”, dispararon.
Es en este sentido que en tormenta de nombres, fuentes consultadas dieron cuenta del “círculo íntimo de Julián Álvarez”, espacio donde se ubican “los hermanos Stamilla”, indicados como los encargados de “asegurar una importante caja del Servicio Alimentario Escolar (SAE), volviéndose socios estratégicos”, generando la “zona liberada” para que el “Grupo L” crezca y avance en comunas hermanas (camporistas) como Quilmes de Mayra Mendoza y Moreno de Mariel Fernández respectivamente.
“¿Cómo actuará el Gobierno Nacional de Javier Milei?” volvieron a preguntarse las fuentes consultadas ya que se traza una nueva línea en el crecimiento de empresas asociadas al poder político por más de 40 años.