
La dramática definición del intendente de Ezeiza, Gastón Granados, sobre el incendio y la explosión en el Polo Industrial Spegazzini que dejó un saldo de «cinco empresas que literalmente desaparecieron» y daños estructurales masivos.
El intendente de Ezeiza, Gastón Granados, calificó el devastador incendio ocurrido en el Polo Industrial Spegazzini como «una catástrofe que no tiene precedente» en la historia del partido, luego de que una fuerte explosión posterior al inicio de las llamas arrasara con gran parte del complejo.
El saldo preliminar del siniestro es demoledor: «Hay cinco empresas que literalmente desaparecieron», lamentó Granados, quien también detalló que otras cinco o seis sufrieron daños estructurales graves a causa de la onda expansiva.
La magnitud de la destrucción y la onda expansiva
El fuego, que se originó en la planta Logischem, dedicada al almacenamiento de productos químicos, se agravó minutos después por una explosión de magnitud que el intendente comparó con «una bomba».
«Fue una cosa impactante en su magnitud, la vibración de la explosión fue tremenda», señaló Granados. La fuerza fue tal que no solo derrumbó paredes y torció techos de empresas aledañas, sino que causó daños colaterales a considerable distancia, como la afectación a la vivienda del futbolista Franco Armani, capitán de River Plate, un hecho que grafica el poder destructivo del evento.
Entre las compañías que sufrieron la pérdida total se encuentra una importante fábrica familiar de plásticos y la empresa Iron Mountain, conocida por el resguardo de documentación. El intendente aclaró que, si bien Iron Mountain había instalado una nave moderna con sistemas antiincendios de primer nivel, fue afectada «de rebote» por la explosión de la planta química lindera, con bomberos registrando temperaturas de más de 500 grados en ese sector.
Investigación y tarea de reconstrucción
Tras varios días de arduo trabajo para controlar las llamas, el fuego fue prácticamente sofocado, lo que permitió el inicio de las pericias judiciales. La investigación, a cargo de la fiscal Florencia Belloc de la UFI 1 de Ezeiza, busca determinar lo más rápido posible «qué fue lo que pasó y cómo se originó».
Para no entorpecer el trabajo de los especialistas de la Policía Ecológica y la Superintendencia de Bomberos de la Policía Federal Argentina, los focos que aún persisten en las empresas aledañas están siendo monitoreados para que se apaguen «de manera natural».
Granados subrayó que la etapa de reconstrucción será larga y compleja, ya que la remoción de escombros, chapas y hierro retorcido «va a llevar muchos meses». A pesar de la tragedia, el polo industrial cuenta con 50 fábricas, de las cuales 45 están en condiciones de funcionar normalmente, por lo que se habilitó una vía secundaria para no interferir en la logística diaria mientras avanza la investigación en la zona cero.
El jefe comunal confirmó que se encuentra en gestiones con el gobernador de la provincia, el presidente del Banco Provincia y el Ministro de Producción para articular la ayuda necesaria para la reconstrucción y el apoyo a los propietarios y trabajadores que «perdieron el trabajo de toda su vida».


































