
Con cortes de luz en zonas clave, denuncias cruzadas y una participación alta, Corrientes eligió bajo sospechas. El oficialismo radical retuvo el poder con Juan Pablo Valdés, mientras los libertarios naufragaron en su intento de instalarse territorialmente. El resultado reconfigura el mapa político y deja abierta una disputa por la legitimidad del proceso.
La provincia de Corrientes vivió este domingo una jornada electoral marcada por el calor, la alta participación y una serie de cortes de luz que afectaron el normal desarrollo del comicio en al menos cinco municipios del interior. Mientras el oficialismo de Vamos Corrientes se adjudicaba el triunfo con Juan Pablo Valdés al frente, desde sectores opositores y fiscales independientes comenzaron a circular denuncias sobre interrupciones del suministro eléctrico en zonas clave durante el horario de votación.
Cortes de luz y sospechas en el interior
Según reportes locales, los apagones se registraron entre las 11 y las 15 horas en localidades como Santo Tomé, Curuzú Cuatiá, Esquina, y parte de Goya. En algunos casos, las escuelas permanecieron abiertas pero sin energía, lo que dificultó el funcionamiento de las máquinas de registro y generó demoras en la constitución de mesas. Aunque el gobierno provincial atribuyó los cortes a “sobrecargas por altas temperaturas”, referentes de Limpiar Corrientes y La Libertad Avanza denunciaron que se trató de “maniobras para desalentar el voto opositor en zonas calientes”.
Resultado: continuidad radical y golpe a los libertarios
Con más del 70% de participación, el frente Vamos Corrientes logró imponerse con el 52,6% de los votos, lo que podría evitar una segunda vuelta si se confirma la diferencia de más de 10 puntos sobre el segundo. El peronismo, con Martín Ascúa, quedó en segundo lugar con el 20,1%, mientras que La Libertad Avanza apenas alcanzó el 8,2%, quedando fuera de toda disputa territorial.
Este resultado representa una doble señal: por un lado, la consolidación del poder radical en Corrientes, ahora con el hermano del actual gobernador al mando; por otro, el fracaso del experimento libertario en una provincia donde apostaban a “consolidar marca” y fidelizar votos. La evacuación de Karina Milei durante el cierre de campaña, en medio de incidentes con manifestantes, terminó de sellar una performance adversa para el espacio de Javier Milei.
¿Qué se juega más allá de Corrientes?
El resultado correntino tensiona el mapa político nacional en la antesala de las elecciones en Buenos Aires. Para el oficialismo radical, es una muestra de fuerza territorial y continuidad institucional. Para los libertarios, una advertencia: sin estructura ni acuerdos locales, el discurso disruptivo puede naufragar ante el aparato provincial. Y para el peronismo, una oportunidad de reposicionarse en segunda vuelta si logra capitalizar el descontento y las denuncias.