«Bóvedas sin puertas, nichos y tumbas sin placas, nidos de palomas, galerías sin techos, pasillos destruidos, suciedad, baños públicos deteriorados y falta de seguridad, son parte del estado actual del cementerio municipal», señaló el concejal Jorge Villalba.
«Hace años que vengo marcando lo que está aconteciendo, presentando proyectos pero parece que nadie se quiere hacer cargo de hacer las cosas bien», reflexionó el edil enrolado en las filas de la Coalición Cívica Ari, y agregó que «el estado de abandono, los robos de placas y puertas así como robos a los deudos que se acercan al cementerio, se siguen sucediendo».
«En el accionar diario hay que tener criterio y estar atento a todo. No puede ser que en plena época de dengue, donde se habla de no dejar recipientes con agua nos encontremos con canillas perdiendo o reservorios con agua acumulada.»
Siguiendo esta línea, Villalba aseveró que «es necesario que elaboren un plan de acción integral para el cementerio, que lo hagan público y que lo ejecuten», a lo que recordó que «las tasas municipales como la del cementerio, se pagan como retribución a la prestación de un servicio, y acá las prestaciones brillan por su ausencia».
