El intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, quien recientemente se unió al partido La Libertad Avanza (LLA), respondió con firmeza a las declaraciones del expresidente Mauricio Macri, quien sugirió que los dirigentes que abandonaron el PRO para unirse a LLA «tenían precio» y «ya los compraron».
Valenzuela, amigo personal de Javier Milei, utilizó las redes sociales para replicar: «Si algo no tengo es precio. Nuestros valores con Patricia Bullrich son claros: apoyar el cambio que votaron los argentinos y no caer en especulaciones partidarias».
Las palabras de Macri, pronunciadas en un encuentro del PRO en Mar del Plata, generaron una intensa reacción en el ámbito político. El expresidente había señalado que algunos dirigentes que se alejaron del PRO no representaban el núcleo más valioso del espacio político. Estas declaraciones fueron acompañadas por una foto junto a Guillermo Montenegro, intendente de General Pueyrredón, y Cristian Ritondo, diputado nacional, quienes impulsan la alianza con LLA en la Provincia de Buenos Aires.
Si algo no tengo es precio. Nuestros valores con @PatoBullrich son claros: apoyar el cambio que votaron los argentinos y no caer en especulaciones partidarias! https://t.co/gdVwXaEIiN
— Diego Valenzuela (@dievalen) April 23, 2025
Valenzuela, conocido por su actividad en redes sociales, respondió también a un tuit de Fernando De Andreis, asistente de Macri, quien había compartido las declaraciones del expresidente. La réplica de Valenzuela generó una respuesta de Facundo Pérez Carletti, secretario general del PRO, quien defendió a Macri y cuestionó la postura del intendente.
Sin embargo, Valenzuela continuó con su postura, destacando su convicción y valores, y subrayando su orgullo por ser el único intendente del PRO de 2015 que permanece en el Conurbano bonaerense.
Este intercambio refleja las tensiones internas en el PRO y las dinámicas políticas que se desarrollan en el contexto de las próximas elecciones en la Provincia de Buenos Aires. La alianza con LLA y las críticas cruzadas entre dirigentes marcan un escenario político complejo y desafiante para los partidos involucrados
