Lo que comenzó como un altercado en la calle terminó en una persecución policial digna de un guion de acción. Un hombre de 52 años fue detenido tras golpear a un colectivero, robarle la unidad y protagonizar una huida por las calles de Quilmes Oeste.
El inicio del caos
El reloj marcaba las 22:30 del domingo cuando la tranquilidad de la Avenida Smith se vio interrumpida por una escena surrealista: un hombre viajaba colgado del estribo de un interno de la línea 580, exigiendo a los gritos que lo dejaran subir.
El chofer, priorizando la seguridad ante la actitud violenta del sujeto, intentó seguir camino hasta un lugar iluminado. El desenlace ocurrió en la estación de servicio de Einstein y Avenida La Plata. Allí, al abrirse las puertas, la tensión escaló a violencia física: el agresor subió a la unidad, le propinó varios puñetazos al conductor y lo obligó a bajar, dejándolo a pie y herido en plena vía pública.
La huida y el cerco policial
Con el colectivo vacío —ya que la unidad estaba terminando su servicio— el delincuente tomó el volante y emprendió la fuga. Sin embargo, el alerta radial fue inmediato.
El despliegue de seguridad no tardó en cercar la zona:
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Fuerzas involucradas: Policía de la Provincia de Buenos Aires y Prefectura Naval Argentina.
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El desenlace: Tras un seguimiento controlado, el «chofer improvisado» fue interceptado en el cruce de las avenidas Calchaquí y Laprida.
Situación legal y salud
El conductor agredido fue atendido por una ambulancia del SAME debido a un fuerte golpe en el rostro. Afortunadamente, se informó que se encuentra fuera de peligro.
Por su parte, el detenido quedó a disposición de la UFI N° 7, bajo la carátula de “Robo calificado por tratarse de vehículo en vía pública”. El hombre permanece alojado en la Comisaría 9ª de Quilmes, mientras la justicia intenta determinar qué motivó semejante ataque (con información de Quilmes Data).
