Se trata de una actividad que estaba pensaba para recaudar fondos para la Asociación de Bomberos Voluntarios locales, pero diversas denuncias de vecinos que apuntaban al sostenimiento del aislamiento social, obligó a suspenderla.
«La Comisión Directiva y el Cuerpo Activo de Bomberos Voluntarios de Florencio Varela, lamentamos informar que el evento planificado para el fin de semana AUTOCINE, se encuentra suspendido hasta nuevo aviso, ya que el municipio habría recibido según nos dicen, más de 250 denuncias de ciudadanos de Florencio Varela, los mismos por quienes estamos dispuestos a dar nuestra vida, aludiendo que bares, heladerías, restaurantes, cafés, casas de té, no tienen autorización para colocar mesas en las veredas de los negocios para ampliar sus oferta gastronómica y solo trabajan bajo la modalidad de delivery o retiro.»
Con estas palabras comienza el comunicado emitido hoy por los Bomberos de Varela dando cuenta los motivos de la suspensión de la jornada de autocine pensada para este fin de semana, ideada para generar una actividad de esparcimiento familiar en el marco de la pandemia de Covid-19 y para recaudar fondos para los cuarteles.
Pero resulta que las denuncias recibidas por la gestión de Andrés Watson obligaron a suspender todo hasta nuevo aviso.
«En este sentido nos solidarizamos y acompañamos a cada emprendedor propietario, dueño y trabajador que afronta está difícil situación como consecuencia de la pandemia», continúa el comunicado.
«En nuestro caso somos una asociación sin fines de lucro, donde nuestros bomberos no cobran sueldo, pero que igualmente debemos afrontar gastos mensuales de luz, gas, agua, hasta el teléfono donde ingresan los llamados de emergencia, equipamientos, móviles, trajes de equipamiento personal, combustible, comida, capacitaciones para brindarle el mejor servicio a nuestros vecinos, muchos de ellos hoy denunciantes lo que nos llena de profundo dolor y tristeza.»
«Contamos con pocas reservas hoy, luego de todos estos meses sin un ingreso acorde a nuestros gastos», recalcaron, y agregaron que ellos mismos dan y arriesgan la vida por el otro, «queda claro que todos no pueden ser bomberos, no tienen las agallas pero mucho menos el corazón».
«Gracias a todos (muchos, muchísimos por suerte) por sus palabras de apoyo y de aliento para seguir. Pero es muy difícil seguir en estas condiciones, donde no podemos ver como sociedad que esto no es un acto para enriquecernos sino solidaridad y apoyo a una institución que está las 24 horas del día y los 365 días del año siempre al lado de quien lo necesita, sin banderas, sin colores más que los nuestros, solo por honrar la vida.»