Lo que parecía ser un viaje más en la línea 540 terminó en un momento de tensión y peligro para un pasajero que cayó al asfalto tras la rotura de una ventanilla. El hecho ocurrió el pasado 12 de junio en la localidad de Ingeniero Budge, partido de Lomas de Zamora.
El colectivo circulaba por la esquina de Tabaré y Goya cuando, al tomar una curva a gran velocidad, uno de los paneles laterales de vidrio cedió repentinamente. El pasajero, que habría estado dormido apoyado sobre la estructura, salió despedido hacia la calle. La secuencia fue registrada por cámaras de seguridad desde distintos ángulos y muestra cómo el hombre queda tendido, mientras un auto logra esquivarlo a último momento sin detenerse.
Lo más inquietante del caso es que el conductor del colectivo continuó su marcha sin frenar, mientras la víctima intentaba reincorporarse, visiblemente desorientada. Un vecino que presenció la escena corrió a socorrerlo y logró detener el tránsito para evitar una tragedia mayor.
Momentos después, una ambulancia trasladó al herido a un centro de salud. Aunque sufrió lesiones importantes, se encuentra fuera de peligro.
El episodio reabre interrogantes sobre el estado de mantenimiento de las unidades de transporte público y el accionar de los choferes frente a situaciones de emergencia.
