El futuro embajador argentino en España se refirió a la situación generada por el Covid-19 y respaldó las medidas tomadas por Alberto Fernández y su Gabinete. Además, volvió a considerar como favorable que se aplique un impuesto a las grandes fortunas.
En una videoconferencia convocada por el Movimiento de Restauración Peronista para disertar sobre “El impuesto a las grandes fortunas y la ética de la solidaridad”, Ricardo Alfonsín destacó las decisiones de Alberto Fernández para enfrentar la pandemia generada por el coronavirus, mencionando el deteriorado estado del sistema sanitario heredado de la anterior gestión. “Desde el punto de vista ético, las medidas tomadas por el gobierno fueron las correctas. Se trató de salvar vidas aplanando la curva de contagio y ganando tiempo para organizar el sistema de salud, que no estaba preparado para enfrentar una situación así”, comenzó explicando el dirigente radical.
A su vez, Alfonsín brindó un análisis sobre el impacto económico que sufrieron distintos sectores ante la extensión de la cuarentena: “Económicamente hablando, las decisiones también fueron acertadas. Si no veamos los resultados de aquellos países en donde no se tomaron nuestras mismas medidas para salvar su economía: Estado Unidos tiene 35 millones de personas desempleadas. El déficit fiscal que va a tener no reconoce precedente en los últimos ochenta años, la caída va a ser enorme”. Y haciendo hincapié en lo sucedido en Argentina: “Más allá de la cuarentena, la economía argentina se iba a ver afectada de todas formas por lo que está ocurriendo en todo el mundo. Los problemas económicos son por la pandemia y su impacto mundial”.
En la charla, que fue moderada por Pedro Milla (Secretario General de la Federación Argentina Sindical de Petróleo, Gas y Biocombustibles y referente nacional del MRP), Jorge Deantoni (Delegado Regional – San Martín de la Asociación Bancaria) y Rodrigo Estigarribia (Subsecretario de la Jefatura de Gabinete de San Martín), el futuro embajador argentino en España también se refirió a la polémica por el impuesto a las grandes fortunas y, si bien afirmó que “sería un buen instrumento”, reconoció que es “complejo” aplicarlo en estas circunstancias. “No es una discusión económica, es ética. ¿Es justo o no que las fortunas personales más grandes de la Argentina hagan un aporte adicional para los más afectados por consecuencias sanitarias?” -concluyó Alfonsín- “Los que se oponen presentan argumentos mínimos y muy poco serios. No se le puede exigir a alguien ser solidario, pero las ciudades tienen derecho a formar sus convivencias para que se viva en solidaridad y democracia”.
