Vecinos y trabajadores de la localidad avellanedense de Dock Sud denuncian la «ausencia de atención médica» en la salita de Combatientes de Malvinas e Irala. «No cuenta con elementos básicos para la atención, cerrada desde hace días por la falta de agua», indicaron.
El Partido Obrero de Avellaneda viene denunciando la «falta de asistencia» y de «Trabajos de infraestructura» que atentan contra la atención de la Salita 15, el normal funcionamiento del jardín de infantes Hornerito y la Escuela el colegio n° 9, suspendiendo el dictado de clases.
«Días atrás, el intendente Jorge Ferraresi junto a su esposa y jefa de gabinete Magdalena Sierra, inauguraban obras de remodelación de un club deportivo cercano. Un par de kilos de cemento y algunos litros de pintura para lavarle (y lavarse) la cara, pero ninguna solución a las necesidades más urgentes de lxs habitantes del Docke, y todo Avellaneda», indicaron desde el espacio de izquierda.
La salita se encuentra emplazada frente a las Torres del Docke, «complejo habitacional donde hace largos años es zona de disputas de grupos narcos, barras bravas y punteros políticos», donde Dos años atrás «perdía la vida un bebé -en la salita 15- luego de ser alcanzando por una bala».
“Meten en cana a perejiles, no a los que cortan el bacalao, viejo. Hace una semana metieron a mi hijo porque estaba fumando con sus amigos en la placita de Alem, pero a los que la manejan, los grosos, que nunca vivieron acá, esos no la pagan nunca”, relató Oscar, habitante de las torres según consta en el comunicado.
“La salita es muy importante para el barrio. Cuando tenemos una emergencia venimos acá. Hace poquito llevamos a una vecina que se había fracturado y le hicieron las primeras curaciones. Pero hace mucho que se ve que trabajan con faltante de todo. Que nos cierren la salita es un problema para nosotros. Si tenemos una urgencia la 16 la tenemos a más de diez cuadras, y el Fiorito ni te cuento. Un remis es un dineral, y algunos que no quieren venir”, comentó Laura, vecina del Docke, y agregó : “Yo tengo mis años, nací y viví toda mi vida en el barrio. Nunca estuvimos en la agenda de los políticos. Capaz para los votos vienen y te levantan una pared, desmalezan un poco o te pintan los cordones. Por lo que me acuerdo, la última vez que hicieron algo en la salita fue hace más de 10 años”.
Parte del descontento que enumera el PO de Avellaneda se debe a que el Ejecutivo municipal «sumó su cuota de ajuste aprobando en el Concejo Deliberante el presupuesto 2023, con un aumento en salud inferior al 5%, y un tarifazo de la Tasa de Servicios Generales (TSG) promedio del 84%».
«En Avellaneda son miles lxs habitantes que sobreviven sin agua potable. Como por ejemplo en Villa Inflamable, muy cerca de la salita 15, con un bidón de 5 litros de agua potable por familia por semana. La ausencia de un elemento tan esencial para la vida es de mayor preocupación si hablamos de un centro de salud y educación», apuntaron.
Desde el Partido Obrero en el Frente de Izquierda Unidad recalcaron que, ante esta situación, «acompañamos la enorme lucha que vienen desarrollando los trabajadores de la salud contra la precarización en las condiciones salariales y laborales».
«El gobierno de Todos-PJ de Avellaneda, con el silencio cómplice de Cambiemos-UCR, hunden en la barbarie al pueblo de Avellaneda. La salida a la crisis es de lxs trabajadorxs. Es urgente la elaboración y puesta en marcha de planes de obras públicas y viviendas populares, bajo control de lxs vecinxs y laburantes de las barriadas y villas. Que Ferraresi informe dónde destinará las partidas presupuestarias. Como así también que explique dónde fueron a parar los más de $18 mil millones de superávit 2021. Triplicación del presupuesto en salud y educación.»
