El intendente de Lomas de Zamora visitó el programa radial Sin Retorno y lanzó fuertes definiciones. “Me gustaría que Cristina sea la presidenta del PJ nacional”, declaró.
El intendente de Lomas de Zamora, Federico Otermín, expresó su apoyo público a una reelección de Máximo Kirchner al frente del PJ bonaerense. Al mismo tiempo propuso a Cristina Fernández para conducir al PJ en el orden nacional. El Jefe Comunal lomense visitó el programa radial Sin Retorno (lunes a viernes de 10 a 13 por GPS El Camino FM 90.7), en el que habló no solo de política partidaria sino también de gestión.
Durante la entrevista Federico Otermín aseguró que “en Lomas de Zamora gobierna el peronismo”, aunque lanzó una encendida defensa de La Cámpora, al afirmar que “hay un ataque sistemático desde el poder a La Cámpora porque es la organización que está más vinculada a Cristina, y lo hacen porque entienden que es cuestionar a Cristina”.
Acto seguido no dudó en señalar que “a mí me gustaría que Cristina sea la presidenta del PJ nacional, porque eso nos simplificaría y ordenaría”.
Cuando se le preguntó si apoyaría una reelección de Máximo Kirchner, respondió de manera categórica: “Yo estoy de acuerdo y me parece muy bien. Nosotros fuimos parte de los que impulsamos, en su momento, que Máximo sea el presidente del PJ de la provincia de Buenos Aires”.
En ese contexto aseguró que “es un gran compañero que tiene una capacidad de organización importante y está muy demonizado porque es el hijo de Néstor y Cristina”.
“Por supuesto que la apoyaría. No sé si tiene vocación de seguir al frente del partido. Son conversaciones que se darán en las próximas semanas. Pero me parece interesante enfilar con un rumbo claro de cara a lo que viene”, añadió.
La interna
Cuando se le preguntó por las diferencias internas y las críticas lanzadas por los intendentes Fernando Gray y Jorge Ferraresi, reconoció que “venimos de una experiencia de gobierno que no estuvo bien. Bienvenida la autocrítica y la discusión, a mí nada de eso me escandaliza. Sin dudas vamos a poder encontrar el dispositivo para poder estar juntos todos los compañeros”.
De todas formas advirtió que “muchos compañeros, que se quejan por los armados de las listas, estuvieron ellos o sus señoras en las listas”.
Para cerrar la polémica declaró: “El peronismo de la provincia de Buenos Aires tiene que hacer una autocrítica grande, porque en el anterior gobierno hubo muchos ministros que vinieron de la provincia de Buenos Aires. Ferraresi fue ministro, Katopodis y Juanchi Zabaleta. Hubo una representación nutrida. Hubo un rol protagónico en un gobierno que no terminó funcionando”.
Kicillof
Federico Otermín también ponderó el rol de Axel Kicillof dentro del kirchnerismo, además de subrayar que “está ayudando a Lomas de Zamora”. De todas formas tomó distancia de una eventual candidatura presidencial.
“Es demasiado pronto y sería un grave error plantear una candidatura presidencial cuando falta tanto tiempo. Hay que ser muy respetuoso de los tiempos electorales”, declaró.
Gestión
Federico Otermín también habló de su gestión. Trazó un balance positivo, aunque aclaró que “nos toca gobernar Lomas de Zamora, en un momento de la historia en el que por primera vez hay un estado que se retira. No hay ningún tipo de recursos”.
“La única política que veo del gobierno es la del ajuste y no gastar plata. Y todo eso impacta en la condición de vida de la persona. Hay un retiro del estado nacional”, remarcó.
El intendente de Lomas de Zamora reiteró sus críticas por la interrupción de las obras, aclaró que las que se están haciendo en el municipio son con recursos de la Provincia, y que no ha llegado ayuda desde el Ministerio de Capital Humano.
En el cierre puso el acento en la cuestión seguridad. “En Lomas de Zamora hay tolerancia cero para la delincuencia”, subrayó.
Contó que existe un diálogo fluido con el ministro de seguridad, Javier Alonso. Y que junto a los intendentes vecinos y la Justicia están trabajando en las “fronteras porosas”, promoviendo la articulación de la tecnología con la que cuenta cada comuna para avanzar en la traza de un «mapa del delito».
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