
Un vecino de Quilmes vivió una doble pesadilla el fin de semana: primero le robaron su auto, luego intentaron extorsionarlo para recuperarlo. El hecho ocurrió en pleno centro de la ciudad, en la intersección de Almirante Brown y Olavarría, cuando la víctima estacionaba su Ford Falcon durante la noche.
Horas después del robo, comenzó a recibir mensajes de desconocidos que le exigían 100.000 pesos a cambio de información sobre el paradero del vehículo. Según los textos, el auto estaría en Florencio Varela, aunque no se brindaron detalles concretos.
La víctima radicó la denuncia en la comisaría correspondiente, dejando asentado tanto el robo como las comunicaciones extorsivas. Hasta el momento, el Falcon no fue recuperado y la investigación continúa bajo la órbita de las autoridades policiales.
Robo + extorsión: ¿nueva modalidad del delito urbano?
El caso expone una modalidad creciente en el conurbano: el robo seguido de extorsión digital, donde los delincuentes buscan monetizar el daño antes de que intervenga la justicia. ¿Qué protocolos existen para estos casos? ¿Cómo se articula la investigación entre jurisdicciones cuando el vehículo robado aparece en otro distrito?